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Que no te falte NIVEA! Era el lema de un spot publicitario de hace bastantes años. Aunque muchos más todavía tiene esta legendaria crema!!!
En el Hamburgo del año 1911, fueron tres hombres los responsables de su creación y comercialización. El empresario y farmacéutico Oskar Toroplowitz junto con el químico Isaac Lifschuütz y el dermatólogo Paul Gerson desarrollaron la primera crema cosmética basada en la Emulsión Eucerit, con la que consiguieron una emulsión estable de agua en aceite, la cual era perfecta como base para ungüentos y cremas. Dando lugar así a la primera crema hidratante de la historia: NIVEA, nombre elegido precisamente por su color blanco como la nieve. Su éxito fue total desde su lanzamiento, en una lata amarilla de lujo, y fascinando tanto al público femenino como al masculino (que lo utilizaba después del afeitado).Aunque la mítica lata azul se la debemos al director de publicidad Juan Gregorio Clausen, quien cambió su diseño para adaptarlo a los valores y estilo de vida de los «felices años 20».
Muchos han sido los factores de triunfo, de la que se conoce como «la crema del siglo XX» (por ejemplo, el espíritu emprendedor de Toroplowitz hizo que en sólo 3 años la crema se comercializara ya en 34 países) por lo que vamos a resaltar sus excepcionales propiedades que la convierten en un «must have» del cuidado y la belleza. Posee un alto poder hidratante, humectante, emoliente, lubricante, suavizante. Todo esto la convierte en una crema multiusos:

1. Como tratamiento facial diario (para pieles muy secas, si no puede aportar grasa)

2. Como tratamiento periódico (semanal, mensual… según las necesidades de cada piel) en forma de mascarilla. Aplicándola en capa gruesa y dejándola actuar unos 20 minutos, aprox. Se retira después con un tissue y puedes proceder a tu limpieza habitual o mantenerla en capa fina durante toda la noche.

3. Como crema desmaquillante o limpiadora. La extiendes sobre el rostro, cuello y escote, realizas un suave masaje en toda la zona y continúas con tu limpieza habitual. Va ideal para todo tipo de pieles, en este caso incluso con las grasas. No olvidemos que los aceites o bases aceitosas son las que mejor eliminan las impurezas en una primera fase de la limpieza.

4. Como crema protectora cuando hace mucho frío.

5. Anti estrías.

6. Excepcional para hidratar y suavizar: codos, talones, rodillas, manos.

7. También en zonas más delicadas como labios y contorno de los ojos (incluso utilizándola como mascarilla)

8. Para el cuello y escote es fantástica, e incluso pueden utilizarlo las personas con cutis mixto o graso, puesto que la piel del cuello y del escote suele ser más frágil y seca, y necesita de muchísima hidratación.

Su textura, desde la perspectiva de hoy en día, que disfrutamos de cosméticos con fórmulas excepcionales, nos resulta muy untuosa y difícil de aplicar, aunque esta característica forma parte de su pátina, a la vez que nos permite su uso en mascarilla o cataplasma.
Uno de los mayores placeres que nos reporta su uso es su inconfundible fragancia, a base de bergamota, naranja, lavanda, rosa, lila y lirio del valle. Su aroma nos transporta a muchos recuerdos…
Hoy en día en torno a la marca NIVEA, se han desarrollado varias gamas de productos adaptadas al mercado actual. Aunque la clásica de la cajita azul sigue triunfando. Que no te falte!